De chiquita, en la época en la que había algunos problemas familiares, el domingo era el día en que mi mamá ponía música. Siempre odié esa parte de la semana. El domingo con música significaba el llanto inminente.
Nunca supe por qué lloraba específicamente, pero la sensación de tristeza me invadía muy profundamente y no podía evitar que se me desbordaran las lágrimas.
Al crecer, la situación familiar mejoró pero el domingo volvió a ser un día no deseado. Lo que me pasaba era querer terminarlo lo más rápido posible, y de no poder dormir, pasar el resto del día en la cama.
Un tiempo después empecé a disfrutar los domingos. A salir un poco, a despreocuparme por la hora que me acostaba y a "tener sueño mañana".
Y hoy, este domingo en especial, me pegó mal. No sé por qué. Todavía no volví a la rutina. No tengo ninguna obligación el día de mañana. Pero de alguna extraña manera que sea domingo me pegó más de lo que debería y estoy desde la tarde haciendo malabares para no largar las lágrimas. Quisiera saber por qué. Tener una ayuda. Un abrazo. Algo.
Sin embargo, no quiero que nadie lo sepa. Últimamente dejé de contar las cosas que me pasan como una autoproteccion.
Si está bien? Si es saludable? Si es correcto? No lo sé.
Lo único que sé es que quiero el resto del año sin domingos si es posible. No tolero otro día más asi.
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